Asociaciones de mujeres contra la violencia

El 23 de septiembre celebramos el Día Internacional contra la Explotación y el Tráfico de Mujeres. Nuestra sociedad progresa en muchos aspectos, pero persiste esta lacra que muchas veces convierte a las mujeres en esclavas y les arrebata su libertad y dignidad. Te invitamos a conocer un proyecto de mujeres que luchan por los derechos femeninos. ¡Un tema al que nadie es ajeno!

Avanzadoras es un proyecto lleno de fuerza, valentía y esperanza que trabaja para garantizar los derechos de la mujer y poner fin a las injusticias, la violencia o la discriminación que padecen. En él, las líderes son las propias mujeres que luchan activamente para cambiar las reglas y transformar la sociedad. ¿Cómo? Alzando su voz u organizándose en asociaciones para alcanzar su autonomía. ¡Pero hay más!

Un ejemplo de esta unión entre mujeres son la Asociación Mujer Tejedora Del Desarrollo (Amuted) y Majawil Q´ij (El Nuevo Amanecer), dos organizaciones guatemaltecas que nacen para implantar la equidad de género, el respeto o el reconocimiento hacia la mujer, en un país donde precisamente la violencia hacia mujeres y niñas es algo generalizado y permanente. ¿Quieres saber cómo lo hacen?

Amuted cuenta con la lideresa maya kaqchikel Edna Calí, experta en formación para la incidencia política y el fortalecimiento de los espacios municipales para ayudar a las productoras. Ella se ocupa de la atención integral directa en los casos de violencia de género, con un planteamiento de sensibilización que implica a los hombres.

 

A través de esta asociación, Edna ha podido dar a conocer la situación de discriminación y racismo que sufre la mujer indígena, incluso por su vestimenta, así como poner de manifiesto que las instituciones públicas desconocen su lengua, lo cual las perjudica a la hora de poder comunicarse.

Las mujeres indígenas nos hemos organizado en Guatemala para luchar contra la discriminación y defender nuestros derechos.

Estas son las palabras de María Morales, lideresa maya k´iche y una de las promotoras de El Nuevo Amanecer, organización que actualmente encabeza, y donde impulsa la participación política de la mujer indígena, auxilia a aquellas que se encuentran en situación de violencia o pobreza y reivindica una vida libre de violencia para ellas.

Gracias a esta asociación, María puede dar a conocer la violencia que se ejerce sobre la mujer indígena en Guatemala, pues al racismo se le suma la violencia política a través del ejército y la policía, y también la violencia intradoméstica. Majawil Q´ij es el respaldo para que las mujeres se empoderen, y las lideresas como María son el medio para informarlas de sus derechos, ya que la formación es esencial para hacer frente a estos contratiempos.

Para dar mayor visibilidad a la labor de esas mujeres avanzadoras que están impulsando cambios en su entorno, cada año se celebra un concurso para homenajear el trabajo de una avanzadora en España. ¿Lo conoces?

El pasado año, el premio otorgado por 20 minutos y Oxfam Intermón recayó en Mabel Lozano, que a través de su documental Chicas nuevas 24 horas nos acerca una realidad tan cruel e incomprensible como la trata de mujeres, un negocio donde ellas pasan a ser siervas, un trozo de carne que se comercializa, un objeto que se usa y se tira.

Chicas nuevas 24 horas se rodó entre España, Argentina, Colombia, Paraguay y Perú, y abre los ojos al espectador ante un negocio que mueve 32 millones de dólares al año, pues como explica Mabel:

La sociedad debe saber que existe esclavitud aquí, a la vuelta de la esquina, que lo que unos llaman prostitución, por lo general es explotación sexual, abuso y violencia.

Puedes acceder a todo el contenido del proyecto Chicas nuevas 24 horas desde aquí y ampliar información sobre este tema de actualidad. ¡Vale mucho la pena!

En definitiva, ellas son madres y trabajadoras como tú. Son mujeres como Edna y María o personalidades como Mabel las que nos están mostrando que es posible transformar la sociedad y que es necesario ofrecer a las mujeres los medios para poder elegir su destino con libertad. Escúchalas y únete a ellas: juntos, todos y todas, podemos lograr un mundo igualitario y libre de violencia de género. ¡Ganaremos la batalla!