“No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy” o “el tiempo vale oro”. El sabio refranero español está lleno de alusiones al concepto del tiempo. El tiempo es un bien muy valioso para todos. ¿Pero sabías que ahora también lo podemos intercambiar gracias a los bancos del tiempo? ¡Te contamos de qué va todo esto! 

¿Qué es un banco del tiempo?

La base sobre la que se asientan los bancos del tiempo es el hecho de que todas las personas tenemos algo que pedir y algo que ofrecer.  Con esta idea, han surgido los llamados bancos del tiempo: grupos de personas que se ayudan mutuamente sin necesidad de dinero, intercambiando sus horas libres. La moneda es la hora. 

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Los tipos de intercambio que nos permite un banco del tiempo son diversos, entre ellos, los siguientes:

  • Atención a personas (cuidado de niños o acompañamiento a mayores)
  • Cuidado del cuerpo y la salud (peluquería o masajes)
  • Formación (apoyo para realizar los deberes, dar clases de baile, pintura, música…)
  • Idiomas (conversación o traducción)
  • Informática (pasar trabajos o chequear virus)
  • Orientación o asesoramiento (temas financieros o laborales)
  • Tareas domésticas (cocinar o planchar)

Los bancos del tiempo fomentan las relaciones sociales, los valores de igualdad, respeto y confianza, porque gracias a ellos las personas se ayudan y dan solución a necesidades. Pero… ¿cómo funcionan? Te lo contamos en 4 pasos:

  1. El nuevo miembro rellenan una ficha indicando lo que ofrece y lo que necesita.

  2. Recibe un talonario de horas para que pueda realizar los intercambios y una lista con los datos de contacto y lo que ofrecen el resto de miembros.

  3. Si necesita un servicio o favor de otra persona, se pone directamente en contacto con ella.

  4. Cada vez que se realiza un intercambio se informa a la secretaría del banco que es la encargada de vigilar que no haya desequilibrios entre el tiempo que se ofrece y el que se recibe.

    Descubre lo que hemos logrado este último año

¿Dónde puedo encontrar un banco del tiempo?

En este mapa podrás buscar tu banco de tiempo más cercano y empezar a intercambiarlo. Te hablamos de algunos de ellos aquí:

  • Bancos del tiempo en Barcelona. Como dice la asociación que los promueve: el banco del tiempo favorece las personas por medio de las personas. Facilita la inclusión social a los recién llegados, empuja el intercambio entre generaciones, mejora la conciliación de la vida personal, familiar y laboral en condiciones de igualdad entre mujeres y hombres y da apoyo a las familias.
  • En Madrid el banco del tiempo ha sido creado por la Dirección General de Familia, Infancia, Educación y Juventud como una iniciativa más de los Centros de Apoyo a las Familias (CAF). Para formar parte de él debes dirigirte al CAF que corresponda a tu domicilio.
  • Banco del tiempo de la Universidad de Sevilla. Descarga la inscripción que encontrarás en su web y envíala a: igualdad3@us.es.
  • Para unirte al banco del tiempo de Vitoria tienes que realizar una entrevista personalizada. Puedes contactar con ellos los martes de 11:00 a 13:00 y de 17:00 a 19:00 horas, y los jueves de 11:00 a 13:00 horas en los teléfonos 945122814 y 685754896.

También puedes optar por intercambiar tu tiempo u objetos en plataformas online como Cronnection. En este banco de tiempo podemos obtener una hora virtual por cada hora que hayamos pasado ayudando a otros usuarios de la plataforma haciendo uso de nuestros conocimientos y habilidades. Lo más interesante es que usando las horas virtuales que hayamos acumulado, podremos conseguir la ayuda de talentos profesionales alrededor de todo el mundo.

Cada vez hay más personas que encuentran en el intercambio de tiempo la forma más grata, asequible y cercana de colaborar con otras personas. Puede que tu tiempo sea un bien escaso, pero solo es necesario tener ganas de ocuparlo con aquello que más te llena y te apetece en cada momento. Súmate a estas buenas prácticas, ¡obtendrás mucho más de lo que darás a cambio!

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