¿Cuántas acciones diarias en las que intervienen monedas serías capaz de enumerar? ¡Son prácticamente incontables!

Sin embargo, con la cada vez más consolidada práctica de usar dinero virtual, puede que la calderilla sea pronto cosa del pasado. No te quedes atrás y ponte al día con este fenómeno. ¡Te lo contamos!

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¿Qué es una criptomoneda?

Es una moneda de carácter digital, no emitida ni controlada por una entidad bancaria ni perteneciente a ningún país determinado, que puede ser usada a nivel mundial y con la que puedes adquirir bienes o servicios por medio de transacciones electrónicas.

Su valor depende de los propios usuarios, de modo que cuanto mayor sea el número de sujetos que la empleen, mayor será su atractivo en el mercado.

Se crea y se almacena en la web, ya que su peculiaridad es precisamente que solo existe en internet. De ahí que precisemos disponer de un monedero digital para guardar nuestro capital. ¿Quieres saber más? ¡Sigamos!

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En su informe Virtual currency schemes a further analysys, el Banco Central Europeo decía que, teniendo en cuenta las características observadas actualmente, una moneda virtual sería una representación de valor de tipo digital, no acuñada por un banco central u organismo de crédito, que en algunas condiciones puede ser empleada en lugar de dinero.

Es hora de ver cuáles tenemos a nuestra disposición. Existen muchas más, así que si conoces otras y te apetece compartirlas, ¡no te cortes!

Algunas monedas virtuales

Una manera fácil de seguir la pista a estas monedas es informándonos a través de alguna plataforma de divisas virtual como Coin Market Cap. A continuación, mencionamos a cuatro de ellas:

  • BitCoin

Fue la precursora de este movimiento en el año 2009, con un valor inicial de tan solo 0,17 centavos de dólar. Hoy en día es sin duda la más conocida por el público y también la elegida por los usuarios para sus transacciones.

Son precisamente los propios usuarios los encargados de mantener un libro de contabilidad que recoge el conjunto de las operaciones realizadas, ¡e incluso cuenta con una Fundación Bitcoin que trabaja para promocionar e informar sobre esta moneda!

Las criptomonedas que surgieron después son conocidas comúnmente como altcoins. Entre ellas podemos encontrar las siguientes:

  • Etheresum

Es vista como la principal alternativa, al declararse como un sistema de pagos a nivel mundial con unos tiempos de comprobación de transacciones o una mejor eficiencia de almacenamiento.

  • Ripple

Es conocida por la abreviatura XRP. También dispone de un libro de contabilidad digital global pero no se precisa minería para obtenerla. Sus intercambios son aprobados y admitidos de inmediato, y tiene un método de cambio de monedas propio. 

  • Litecoin

Surge como una opción diferente a BitCoin, de ahí el empleo de un formato distinto de cifrado (scrypt), la producción de un número mucho mayor de unidades de moneda o un tiempo de transacción más rápido.

¿Criptomonedas solo en internet?

Para nada. Ya es posible emplearlas en establecimientos de toda la vida. Por ejemplo, en Madrid tienes el proyecto La calle Bitcoin y también hay plataformas como Aceptamos bitcoin, donde puedes buscar tiendas para comprar a través de ellas.

Eso sí, no te olvides de conseguir tu tarjeta de débito. En webs como Xapo o la española Bitnovo podrás hacerte con una y usarla como tu tarjeta habitual pero pagando con tus bitcoins. ¿Qué te parece?

Dinero que puede amenazar a derechos sociales

Lamentablemente las monedas virtuales también presentan una perspectiva menos atractiva, tal y como nos explican en este artículo de El País. En él se exponen las opiniones de expertos sobre el posible uso del bitcoin para la subvención de prácticas o actividades ilegales, y los peligros de su uso, así como la posibilidad de que como mecanismo de garantía, este tipo de dinero acabe siendo regulado por una entidad bancaria.

La realidad es que el uso ilícito de los capitales parece ser un hecho presente tanto en internet como en el medio tradicional. 

Oxfam Intermón lleva años denunciando que las compañías del IBEX 35 estaban aumentando su presencia en regiones consideradas paraísos fiscalesSi en el año 2013 el número de filiales en estas zonas era de 810, en el 2014 se incrementó en un 10%.

Asimismo, los movimientos de financiación desde estos lugares hacia nuestro país crecieron en un 27,4% en 2015, siendo un 66% del conjunto de la inversión que llegaba a España.

© Pablo Tosco/ Oxfam Intermón

© Pablo Tosco / Oxfam Intermón

¿A qué se debe?

La respuesta es sencilla: las entidades casi no tributan por los dividendos que están consiguiendo fuera de nuestras fronteras.

¿Hay consecuencias?

Sí, ya que no se están embolsando unos impuestos que podrían ir destinados a poner en marcha, por ejemplo, políticas sociales.

Desde Oxfam Intermón se plantea a las autoridades la necesidad de impulsar leyes contra este tipo de prácticas, así como garantizar la transparencia y la rendición de cuentas de las compañías.

De este modo se podrán generar ingresos que garanticen el desarrollo de políticas públicas destinadas a parcelas tan esenciales como sanidad, educación, protección social o cooperación y que favorezcan al conjunto de la sociedad.

Como miembro de la ciudadanía o cliente que adquiere bienes o servicios de alguna empresa, también puedes negarte al escaqueo fiscal de las grandes empresas. Juntos no solo es más fácil, ¡sino que es el camino más rápido para hacerlo posible!

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