Tipos de discriminación que tú puedes combatir

No es necesario cambiar de latitud para percatarnos de que vivimos en un mundo con actitudes, ideas y maneras de hacer que resultan discriminatorias. ¿Cómo podemos combatirlos?

Para ayudarte en tu reflexión, en el post de hoy nos gustaría repasar algunos tipos de discriminación que podemos encontrar en nuestro día a día y que, desdichadamente, seguro que te suenan.  ¡Veámoslos!

Tipos de discriminación que tú puedes combatir

Desigualdad

La desigualdad, entendida como el acceso desigual a los recursos, es una fuente de discriminación creciente. La brecha entre ricos y pobres está alcanzando cotas nuevas y alarmantes. No hace mucho, Credit Suisse ha publicado que el 1%de la población mundial más rica acumula más recursos que el 99% que queda. Además, la riqueza en manos de la mitad más pobre de la humanidad se ha reducido en un billón de dólares a lo largo de los últimos cinco años. Como ves, la desigualdad en el mundo ha alcanzado unos niveles preocupantes en poco más de un siglo, y ha afectado directamente a millones de personas pobres.

Entre otras organizaciones, Oxfam Intermón centra su labor en combatir la desigualdad, que es la base de la pobreza. Nuestra apuesta es clara: nuestro sistema está orientado a favorecer a quien más recursos posee. En vez de favorecer a los menos favorecidos, son los que más tienen los que más viven el crecimiento de ingresos y acaparan la riqueza mundial. Esta riqueza, por lo tanto, no se distribuye de forma equitativa o se deriva a paraísos fiscales, donde, según una reciente estimación, se acumulan alrededor de 7,6 billones de dólares, más que el PIB del Reino Unido y Alemania juntos. 

Ayúdanos a denunciar los paraísos fiscales  y a defender un sistema tributario más justo que garantice las mismas oportunidades para todos. ¡Y tú puedes ayudar a través de la participación social!

Discriminación de género

Aunque las cosas han cambiado, las mujeres todavía luchan contra una discriminación clara por razón de género. Según un estudio de Manpower, una consultora de recursos humanos, las mujeres podrían ganar cerca de un 37% menos que los hombres, y, de hecho, a medida que aumentan los años de experiencia laboral, aumenta esta diferencia.

No solo eso, sino que seguimos apostando por roles sociales que incrementan las diferencias entre hombres y mujeres, como el cuidado de la casa o de los hijos, que sigue correspondiendo en gran parte al género femenino.

Desde Oxfam Intermón queremos acabar con la discriminación en todas sus formas, pero especialmente con la discriminación por género, por eso hemos creado proyectos como Avanzadoras, donde se pretende dar voz a mujeres que sufren injusticias pero actúan para cambiarlas. Es el caso de las campesinas pluriempleadas que no son reconocidas en las estadísticas de empleo y que ni siquiera tienen acceso a la propiedad de sus tierras. Ellas son dueñas de su trabajo pero no les es reconocido por el mero hecho de ser mujeres. ¿Combatimos por un cambio real en sus países?

Con esta breve radiografía de la desigualdad en nuestros días, te habrás dado cuenta de que la discriminación es un problema que nos afecta de forma muy clara y que puede suponer un problema para el grupo social que la sufre. Acabar con ella no solo está en nuestra mano a través de acciones que eviten los prejuicios, sino que es tarea de los gobiernos garantizar un acceso igualitario a los recursos económicos para evitar grupos sociales desfavorecidos, o promover políticas de igualdad de género que eviten la brecha salarial. ¡Pero debemos recordárselo!

Desde Oxfam Intermón seguimos luchando contra estos problemas impulsando proyectos en los que tú también puedes participar. Esta situación pide a gritos que le demos la vuelta. ¿Se la damos juntos?