"Los límites de nuestro lenguaje son los límites de nuestro mundo"

- Ludwig Wittgenstein, filósofo

Pocas reflexiones son más acertadas para el caso del que hoy queremos hablar: el lenguaje sirve para nombrar las cosas, para que podamos conocerlas, y son las palabras las que moldean nuestra realidad y el entorno en el que nos movemos. Por tanto, el lenguaje constituye una parte básica de nuestra concepción del mundo y de las construcciones mentales que utilizamos cada día. ¡Piénsalo!

Pero ¿sabes cuál es la versión de la RAE sobre este hecho? En su Diccionario Panhispánico de Dudas (DPD) matiza el uso del masculino para referirse a ambos sexos como un factor de economía lingüística y aclara que no hay en ello discriminación alguna.

Descárgate aquí nuestra guía gratuita sobre el lenguaje no sexista y aprende  tips para aplicarlo en tu lenguaje cotidiano.

Y no solo eso: también se afirma que el afán por acabar con esta discriminación está dando lugar a soluciones que contravienen la normativa del español y resultan artificiosas, como por ejemplo, hablar de “las y los ciudadanos”. Y tú, ¿cómo lo ves?

feminismo-rae

Puede que, alguna vez, para evitar estas repeticiones, hayas utilizado la @ para referirte al masculino y al femenino, ¿verdad? Hablar de niñ@s o tod@s, por ejemplo, se está volviendo una costumbre que no ha pasado desapercibida para la RAE y, por tanto, se ha añadido un subapartado al DPD en el que se indica que la @ no es un símbolo lingüístico y, normativamente, no podría utilizarse de esta manera.

Otro aspecto en el que la Real Academia ha sido duramente criticada se corresponde, precisamente, con la formación del femenino de muchas profesiones. El Diccionario de la Real Academia admite la existencia de peineros y de peineras, de pero no de alfareros y alfareras: en la entrada destinada a esta profesión, se indica que se trata de un término exclusivamente masculino y que, por tanto, no se acepta el femenino alfarera.

Si bien en el propio DPD se matiza cómo debe construirse el femenino de cada profesión, el Diccionario de la Lengua recoge todavía impropiedades como esta, que se han filtrado con el peso de la tradición —ten en cuenta que, no hace tantos años, había profesiones a las que las mujeres no podían acceder, y oficios tradicionalmente femeninos— y siguen así por el carácter arcaizante de la Academia. ¡Hay más de los que creemos!

Descarga gratis la guía

La forma que tenemos para decir las cosas es lo que moldea nuestra realidad, y el hecho de que hoy en día, cuando las mujeres pueden tener los mismos derechos que los hombres y acceder a los mismos puestos de trabajo, resulta inaceptable que no exista la versión femenina de determinadas acepciones. Si quieres empezar a utilizar un lenguaje inclusivo también en este ámbito, el Instituto de la Mujer ha elaborado una guía con todas las profesiones en masculino y en femenino, que se ha ido actualizando desde que se publicara en 1996, para evitar dudas y confusiones. ¡Échale un vistazo!

El feminismo en la lengua: una paradoja

La invisibilidad de la mujer a través del lenguaje es una lacra social que pesa como una losa sobre la lucha por la igualdad de derechos, porque el lenguaje no solo es una herramienta para comunicarnos: es con el lenguaje con lo que construimos las ideologías, y también con lo que las expresamos. ¡Toma conciencia de su importancia!

Por este motivo resulta paradójico el hecho de que la RAE se manifestara contra las múltiples guías que, en los últimos años, se han ido publicando para fomentar un lenguaje no sexista, basándose en que contraviene la normativa del español. Sea como sea, es importante tener en cuenta aquí que, más allá de lo que dice la norma, el lenguaje es un mecanismo que se renueva constantemente, que evoluciona al ritmo que lo hace la sociedad. Por lo tanto, debe reflejar, también, estos cambios y adaptarse a los nuevos tiempos. ¿Contribuirás a que sea así?

Si quieres empezar a utilizar un lenguaje no sexista, empieza por usar sustantivos de carácter colectivo. En lugar de usar el masculino genérico, puedes hablar de personas, de comunidad, de equipo… ¡Y ojo con el orden de las palabras! Normalmente indicamos el masculino en primer lugar, ¿por qué no hacerlo al revés? Este y otros consejos los encontrarás en la guía  gratuita "Lenguaje no sexista: tips para evitar el uso sexista del lenguaje cotidiano".

lenguaje-no-sexista

Si quieres ampliar información sobre estos temas, en la red encontrarás muchísimos recursos con los que profundizar. Para que vayas abriendo boca, te dejamos una recopilación sobre lenguaje no sexista que podrás utilizar tanto para mejorar tus capacidades como para introducir a los más pequeños y las más pequeñas de la casa en el lenguaje inclusivo. Sólo basta con ser conscientes y actuar: ¡haz correr la voz y apuesta desde hoy por la igualdad de género empezando por nuestro lenguaje!

New Call-to-action