Trabajar en el sector del Comercio Justo es hacerlo en un ámbito de mucha responsabilidad, por eso la Organización Mundial de Comercio Justo ha establecido 10 criterios a seguir por parte del intermediario de Comercio Justo.
La del Comercio Justo es la única red comercial en la que los intermediarios (organizaciones importadoras, distribuidoras o tiendas) están dispuestos a reducir sus márgenes para que le quede un mayor beneficio a las personas que producen los bienes. ¡Conóce los 10 criterios que siguen estos intermediarios y descubre el enorme potencial de este sistema comercial!
Los 10 mandamientos del intermediario de Comercio Justo
El Comercio Justo se establece sobre unas bases de igualdad y transparencia en las relaciones de trabajo que permiten mejorar las condiciones de vida de los productores y productoras de los países del Sur, pero también comunicar a quienes lo consumen que los productos que adquieren han sido elaborados en condiciones dignas. Para conseguir estos objetivos, este sistema se rige en torno a los siguientes criterios:
- Crear oportunidades para las personas productoras en desventaja: es decir, reducir la pobreza mediante el Comercio Justo apoyando a aquellas personas productoras que están marginados en el sistema.
- Responsabilidad y transparencia: por supuesto, estas organizaciones deben ser transparentes en su gestión y sus relaciones económicas, e involucrar a sus equipos en la toma de decisiones.
- Prácticas comerciales justas: deben ser organizaciones preocupadas por el bienestar social y ambiental de los pequeños productores y no maximizar sus ganancias a costa de ellos. Además, cuando se cancela un pedido por causas ajenas a quienes lo producen, se ofrece una compensación por el trabajo ya realizado.
- Pago de un precio justo: es aquel que no solamente cubre costes de producción sino que también permite una producción socialmente justa y ambientalmente responsable. Ofrece un pago justo a los productores y a las productoras y toma en consideración el principio de igual remuneración para igual trabajo tanto de mujeres como de hombres.
- Asegurarse de que no existe trabajo infantil y forzoso: la organización debe acatar la Convención de las Naciones Unidas sobre los Derechos del Niño y la red nacional o local sobre empleo infantil para asegurarse de no participar en estas prácticas.
- Estar comprometidos con la no discriminación, con la equidad de género y con la libertad de sindicación, no discriminando en la contratación, remuneración, promoción o jubilación.
- Asegurar unas condiciones de trabajo correctas: en un entorno seguro y saludable para las personas que trabajan, cumpliendo las leyes nacionales y locales así como los convenios de salud y seguridad.
- Promover el desarrollo de capacidades, llevando a cabo actividades específicas para ayudar a su gestión y producción.
- Promover el Comercio Justo: creando conciencia sobre él y sobre su necesidad en nuestra sociedad. Además, debe tener un compromiso con las actividades y sus objetivos, y emplear técnicas honestas de publicidad.
- Respeto por el medio ambiente: maximizando el uso de materias primas sostenibles en su distribución y comprando a escala local siempre que sea posible. Así contribuyen a minimizar el impacto de sus actividades sobre el planeta. Por eso, todas utilizan materiales reciclados o que pueden ser biodegradados fácilmente en sus embalajes y, siempre que pueden, envían sus productos por mar.
¿Qué te han parecido las reglas por las que se rige cada intermediario de Comercio Justo? Como ves, no solo respetan a los productores y productoras, que son capaces de ser competitivos en el mercado, sino a las personas que consumen los productosy al propio medio ambiente, por eso es una gran alternativa que, en Oxfam Intermón apoyamos desde 1994.
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