De nuevo lunes y toda una semana por delante para preparar deliciosos menús para toda la familia. A veces no es fácil encontrar platos que encandilen a todos o no disponemos de todo el tiempo que nos gustaría para dedicarle a la cocina. ¿Te pasa a menudo?
Pero seguro que acertamos si optamos por incorporar a nuestra bolsa de la compra productos de Comercio Justo. Sanos y ricos para nosotros y garantía de una vida decente y un trabajo digno para familias de agricultores y agricultoras. ¿Cuánto sabes sobre los espaguetis de quinoa de Comercio Justo? ¡Sigue leyendo y descubre el poder de este alimento!
¿Puede un alimento, como por ejemplo la pasta, servir para algo más que quitarnos el hambre?
Sí, hay productos como los spaghettis que, si van acompañados del sello de Comercio Justo, son doblemente buenos porque nos ayudan a seguir una alimentación saludable al no contener aditivos artificiales ni colorantes y ser un producto bio, y porque contribuyen al desarrollo de familias, comunidades y organizaciones productoras.
Su cultivo y producción se efectúa respetando el medio ambiente, ya que los campesinos y campesinas no han empleado pesticidas ni sobre-explotado las tierras y han protegido al mismo tiempo la biodiversidad de la zona.
Como son un producto de Comercio Justo, implican una serie de garantías para los agricultores, agricultoras, trabajadores y trabajadoras que están presentes a lo largo de su proceso de elaboración. Entre ellas encontramos:
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Disponer de un salario digno
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Existencia de igualdad entre hombres y mujeres
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Protección a la infancia
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Acceder a proyectos sociales donde se impulsa la educación y la formación
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Mejoras en centros y asistencia en materia sanitaria
¿Dónde adquirir productos de Comercio Justo?
En la tienda online y tiendas solidarias de Oxfam Intermón puedes adquirir spaghettis de Comercio Justo elaborados con trigo y quinoa de Bolivia cultivada de forma ecológica. Para su producción se emplean métodos tradicionales, consiguiendo así proteger sus propiedades y su inconfundible aroma.
¿Cómo debe ser una buena alimentación?
Podemos seguir las recomendaciones que la Fundación Española del Corazón nos ofrece en su pirámide alimenticia saludable y disfrutar comiendo sano y variado todos los días. Veámosla:
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Un adulto debe consumir entre 1,5 y 2 litros al día de agua para mantener un estado óptimo de hidratación.
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Alimentos como los cereales, las patatas y las legumbres deben ser la base de la dieta, del tal forma que los hidratos de carbono supongan el 50-60% de las calorías.
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Diariamente se deben consumir frutas, verduras y hortalizas, ingiriendo un mínimo de 5 unidades al día. Los productos lácteos también deben estar presentes cada día, entre 2 y 3 raciones.
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El pescado nos ofrece proteínas y omega 3 y su consumo debe ser de 3-4 raciones a la semana. Las legumbres deben estar presentes en nuestra mesa 3 o 4 veces por semana. En cambio, los embutidos y las carnes rojas, por contener grasas saturadas o colesterol, deben ser consumidos de forma limitada.
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Aquellos alimentos con alto contenido en azúcares simples, grasas saturadas o ácidos grasos trans –es decir, los dulces, la bollería industrial, los snacks o los refrescos, por ejemplo–, solo deben formar parte de nuestra nutrición de forma ocasional.
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Con respecto al aceite, el aceite de oliva virgen debe ser nuestra primera elección.
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No debemos olvidarnos de combinar una buena dieta con la práctica de deporte o alguna actividad física de carácter moderado.
Ya conoces el múltiple valor de incorporar a nuestra alimentación diaria productos de Comercio Justo. Y hoy te recomendamos los spaghettis, que puedes encontrar, como siempre, en nuestras tiendas. Al pesto, con verduras, salteados... ¿ya sabes cómo los vas a cocinar? ¡Sea como sea, el triunfo en la mesa está asegurado!