Llega el verano, llega el calor, llega el momento de ir a la playa, a la piscina, a bañarse en un río o un lago. Llega la hora de tomar el sol o de dar largas caminatas por la montaña o la playa. En cualquier caso, llega la hora también de usar un buen protector solar que nos proteja del efecto dañino de los rayos del sol.
Si nunca lo has probado, desde aquí te aconsejamos usar un protector solar natural, sin productos químicos que puedan dañar tu piel. Y te contamos cómo hacerlo tú, en casa y sin que sea nada complicado. ¡Una alternativa económica y sostenible!
Aunque es cierto que los rayos del sol en exceso y a ciertas horas pueden ser nocivos para nuestro organismo, tomar el sol también tiene algunos beneficios, el principal, generar vitamina D en nuestro organismo, una vitamina que ayuda al fortalecimiento de los huesos, aporta energía al sistema muscular, activa las defensas del sistema inmunológico, ayuda a mantener la tensión baja, reduce afecciones de la piel como la psoriasis o el acné, y ayuda a conciliar el sueño. ¿Qué más queremos?
Por tanto, es muy recomendable tomar el sol. Solo tienes que tratar de no exponerte demasiado tiempo al mediodía y usar protección solar para reducir su efecto dañino. ¡Y te traemos una fórmula que te acompañará todo el año, pero especialmente en esta época!
Crema solar con manteca vegetal
Para empezar, necesitarás los siguientes componentes:
- 2 cucharadas de aceite vegetal (puede ser de sésamo, de cacahuete, de avellana, de aceito, de coco…)
- 30 g de cera de abeja
- 30 g de manteca (de Karité, mango, cacao…)
- 1 cucharadita de aceite de germen de trigo
- 10 g de polvo de óxido de zinc
- 30 gotas de esencia de aceite (es opcional, su función es conferir a la crema un olor agradable)
En primer lugar, derrite al baño maría y a fuego lento el aceite, la manteca y la cera. Cuando se mezcle todo bien, deja templar. Después, añade el resto de los ingredientes mezclando bien. Recomendamos, en esta parte, usar una mascarilla para no inhalar los vapores que puedan producirse. Asegúrate de que el óxido de zinc se disuelve bien. Por último, introduce la crema en un bote limpio. ¡Y solo queda probarla!
Crema solar con aloe vera
Nuestra segunda propuesta para elaborar crema solar casera es hacerla con aloe vera como elemento principal. Estos son los ingredientes necesarios para elaborarla:
- 1/4 de litro de aceite de coco, oliva o almendras
- 3 cucharadas de gel de aloe vera natural
- Una cucharada de cera de abeja
- 1 cucharadita de aceite de germen de trigo
- Unas gotas de extracto de semilla de pomelo
- 10 g de polvo de óxido de zinc
- Agua destilada (ayuda a diluir el aloe)
- 30 gotas de esencia de aceite (es opcional, su función es conferir a la crema un olor agradable)
La preparación es parecida a la anterior crema. En primer lugar, se calientan al baño maría la cera de abeja y el aceite vegetal que hayas elegido. Ya fuera del fuego, se añaden el aceite de germen de trigo, el óxido de zinc y, si has decidido añadir este ingrediente, las gotas de esencia de aceite. En este paso, es conveniente diluir bien el óxido de zinc.
En otro recipiente, calienta el gel de aloe vera junto al agua destilada. No mucho, basta con que la mezcla esté templada. Después, mézclalo todo bien y deja que se enfríe. Comprobarás que se endurece. Ya solo queda meter la crema en un tarro o dispensador.
Con estas cremas solares caseras podrás disfrutar del sol sin preocuparte por sus efectos dañinos. Y recuerda que con los ingredientes necesarios puedes elaborar otros muchos productos cosméticos en casa. Atrévete a probarlo... ¡una vez empiezas, no querrás otra cosa!