La ecociudad como una alternativa sana: descubre qué es

¿Te imaginas una ciudad sostenible en la que te mueves en bicicleta, en la que se utilizan solo energías renovables y en la que se come lo que se cultiva? No, no es una utopía, es una ecociudad. Y en este post te contamos en qué consiste. ¡Te enamorarás!

¿Cuáles son los principios de la ecociudad?

Cada vez somos más las personas que nos preocupamos por nuestro entorno y por vivir en ciudades que lo respeten. De hecho, en muchas ciudades se está potenciando el uso de vehículos eléctricos, de bicicletas o de energías renovables para la iluminación, por ejemplo. ¿Cuál es tu contribución?

Cambiar la forma en la que se enfocan las ciudades para garantizar un medio ambiente sano es posible. Se llama ecociudad y estos son sus principios:

• Cultivo a pequeña escala. En la actualidad, muchos de los alimentos que llegan a las grandes ciudades provienen de las zonas rurales, por lo que el transporte produce contaminación. Para evitarlo, la ecociudad promueve el cultivo a pequeña escala en zonas cercanas a la ciudad o en pequeños huertos urbanos.
• Uso de energías renovables. La energía solar y la eólica serían dos alternativas al uso de energías no renovables, como el petróleo o el gas. Se reduce la contaminación y el uso de recursos que se agotan.
• Utilización de transporte público. El uso de transporte público que utilice energías renovables es esencial en una ecociudad para mejorar la movilidad y disminuir la contaminación.
• Peatonalización. Los peatones toman las calles para caminar por las zonas céntricas y evitar el uso de automóviles.
• Construcción con materiales ecológicos. La construcción en una ecociudad utiliza materiales ecológicos que no contaminen y que no degraden el entorno natural.

¿Qué te parece esta declaración de intenciones? ¿Te gustaría vivir en una ecociudad? ¡Te explicamos cómo pasar a la acción!

 

¿Cómo puedes contribuir tú a la ecociudad?

Tenemos en nuestras manos que la existencia de una ecociudad sea posible y real. Para empezar, un cambio en nuestros hábitos diarios puede abrir el camino para garantizar que las generaciones futuras vivan en una ciudad ecológica y sostenible. ¿Necesitas ideas? Las siguientes acciones te pueden ayudar a dar los primeros pasos:

• Utiliza el autobús o el metro por la ciudad. Deja el coche en casa cuando salgas y utiliza el transporte público eléctrico. Ahorrarás dinero y contribuirás a reducir la contaminación.
• Recicla todos los residuos. Separa y recicla todos los residuos que se produzcan en tu casa para que se puedan volver a utilizar y disminuya la producción de plástico y de papel.
• Compra productos ecológicos y de la zona. Alimentarte con productos ecológicos contribuirá a cuidar tu salud y si, además, son de la zona, ayudarás a los productores y productoras locales y evitarás la contaminación que produce el transporte de larga distancia.
• Regula la temperatura de la calefacción y del aire acondicionado. No es necesario que en tu casa haga mucho calor en invierno o mucho frío en verano, regula la temperatura para que sea confortable y para que no se produzca un consumo excesivo de luz.
• Utiliza los colores claros en muebles y en suelos y paredes de tu casa. De esta forma reflejarán mejor la luz y reducirás el consumo eléctrico.

En el fondo, todas las medidas que contribuyen a que nuestras ciudades sean más sostenibles están en nuestras manos y en las decisiones que tomamos cada día, conscientes e inconscientes. Lo importante es tener siempre presente el impacto que generamos en el medio ambiente y la huella que dejan cada una de nuestras pequeñas acciones. ¡Las ecociudades están mucho más cerca de lo que parece!