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¿Cuántos usos del agua conoces? Hay infinidad de acciones diarias que no serían posibles sin ella. No en vano,el agua es uno de los recursos naturales imprescindibles para el ser vivo.
En ausencia de agua dulce o apta para su consumo, la vida se debilita y vencen las enfermedades. ¿Te has preguntado alguna vez qué sería de nosotros y nosotras si no tuviéramos acceso a ella?
Todos somos responsables a la hora de proteger este bien y conservarlo. Para no abusar de este recurso, podemos recurrir a usar el agua de lluvia para muchas actividades. Cumplirá la misma función y nos ayudará a no derrocharla. ¡Te contamos de qué manera!
Algunos usos del agua para el ser vivo
Como te hemos mencionado anteriormente, este recurso natural es esencial para el ser vivo. Sin él, la vida no sería posible.
Veamos algunos usos del agua, y las diferencias entre nuestro estilo de vida y el de otras comunidades de zonas menos favorecidas.
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Agua para el cultivo de nuestros alimentos
Cada vez que por ejemplo, una cebolla, un tomate o una manzana se pudren en tu cocina y terminan en el contenedor de la basura, no solo estás desperdiciando un alimento por no haberlo consumido a tiempo, sino que también estás malgastando agua.
En Burkina Faso, el pequeño huerto de Pascaline ya está sufriendo las consecuencias del cambio climático soportando sequías e inundaciones, y ya no aporta cosechas suficientes para alimentar a la familia.
Ahora las lluvias duran menos y son más fuertes, y los cultivos que maduran no ofrecen grano. ¿Y si estuvieras en el lugar de Pascaline?
Agua para su consumo diario
Fuentes de agua potable en nuestros parques que nos alivian en las épocas de estío, o agua embotellada en diversos formatos a nuestra disposición en los comercios. Sin duda nuestra vida siempre ha sido mucho más sencilla al no tener que caminar para acceder a agua limpia o recurrir a medios de potabilización del agua para evitar enfermedades, ¿no crees?
Jean Louis vivió las consecuencias de la violencia en República Centroafricana tras el golpe de estado. Como muchas otras personas, Jean Louis tuvo que renunciar a beber el agua de sus pozos porque las milicias arrojaron en ellos los cuerpos sin vida de las personas asesinadas.
Aún nos queda un largo camino para comprender el valor real de un vaso de agua.
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Agua para unos correctos hábitos higiénicos
Piensa un momento. ¿Cuántas veces al día te lavas la cara, o te cepillas los dientes, o te duchas? Son gestos cotidianos que no entrañan ningún peligro para nuestra salud, porque en todos ellos empleamos agua limpia. Sin embargo hay personas que padecen de esquistosomiasis o tracoma, algunas de las enfermedades asociadas al uso de agua contaminada.
Noaga vive en Burkina Faso y hasta la instalación de un pozo en su comunidad, recogían agua en mal estado de un estanque lo que conllevaba que precisaran de cuidados médicos debido a las afecciones que les provocaba su consumo.
Hay muchos usos del agua. Pero lo importante es que la emplees de forma responsable.
Anímate a poner en práctica estos consejos para no despilfarrarla o inculca un consumo responsable del agua en los más peques.
Cinco usos del agua de lluvia
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Es perfecta para las plantas de tu hogar porque no tiene ni cal ni cloro. Saca tus plantas a los balcones o terrazas cuando llueva, o bien recógela en botellas o cubos. tus plantas te agradecerán este gesto.
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Precisamente porque el agua de lluvia está libre de cal, es excelente para limpiar los cristales o suelos del hogar, ya que una vez secas las superficies, éstas no quedarán con restos de calcificaciones adheridas.
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Puedes recoger agua de lluvia en cubos o botellas grandes y aprovecharla para limpiar tu vehículo.
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Es ideal para lavar prendas delicadas. Algunas piezas de ropa deben lavarse a mano, y el agua de lluvia es perfecta para ellas.
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Puedes reutilizarla en la lavadora, el inodoro o incluso la piscina, si dispones de ella, mediante un sistema de recogida de aguas, tal y como Repsol te explica en este sencillo vídeo.
¿Se te ocurren más usos del agua? Utiliza el coco porque seguro que encuentras soluciones geniales y muy prácticas para emplear el agua de lluvia, como por ejemplo para dar un buen baño a la mascota o limpiar los útiles de pintura.
¿Por qué deberíamos usar agua de lluvia?
Sauda Hamid, una mujer que vive en Am Ourouk, en el Chad, nos comenta el procedimiento que sigue para poder usar el agua de lluvia y prevenir las dolencias derivadas del consumo de agua en mal estado:
“A veces lavo muy bien un recipiente y lo pongo sobre el tejado para recoger agua de lluvia. Después conservo esa agua tapada dentro de casa. Hago todo esto para evitar las enfermedades. Mi pequeñita bebe de esta agua”.
Sauda no tiene otra opción si quiere ofrecer agua limpia a su familia.
El contexto para entender por qué Sauda recurre a este uso del agua
La guerra de 2013 en República Centroafricana provocó la llegada de más de 90.000 refugiados al Chad.
Muchos de ellos no llegaron hasta los campos de refugiados, sino que se quedaron en los pueblos cercanos.
Allí, una población muy pobre pero guiada por el espíritu de su cultura africana de recibir y ayudar de forma generosa a los que vienen y no tienen nada, les abrieron sus casas y les acogieron.
El problema es que estos pueblos de Chad solo disponen de su buena voluntad. Su población no tiene suficiente agua potable ni pozos para abastecer las necesidades de todas las personas que, huyendo de la lucha armada, han llegado hasta allí.
Tampoco hay suficiente comida. Guiados por el altruismo gastaron sus reservas para que todo el mundo que llegaba pudiera tener un plato de comida.
Por eso, hoy hay muchas familias que solo pueden permitirse comer una vez al día o cuyo alimento son simples hojas que han recogido en el bosque y con las que han hecho una especie de sopa. Pero puede que simplemente no tomen alimento alguno. Porque ya no les queda nada. ¿Visualizas la situación?
Pero puede que cada día, muchas personas y sus familias se despierten sabiendo que no tomarán alimento alguno. Porque ya no les queda nada. ¿Visualizas la situación?
Comparten los mismos usos del agua que nosotros y nosotras, la necesitan para beber y cultivar la tierra. Y también necesitan pozos de agua. ¡Ahí está la clave!
Cuando no es tan simple como abrir un grifo: pozos para poder usar el agua en el día a día
Oxfam Intermón está haciendo posible que la población de Chad pueda disfrutar de los mismos usos del agua que tenemos nosotros y nosotras. ¿Cómo lo llevan a cabo?
El proceso de apertura de nuevos pozos de agua depende del entorno.
Si son pozos profundos, la ONG subcontrata a una compañía de perforación de pozos, que normalmente incluye un estudio geofísico para determinar el lugar más idóneo para construir el pozo.
Finalizada la perforación, una serie de ensayos de bombeo determinarán su productividad.
Según las necesidades de la comunidad, se procederá a instalar una bomba manual, o una bomba eléctrica sumergible, que puede estar conectada a un generador o a paneles solares.
El antes y el después de la llega de un pozo: su valor más allá de los habituales usos del agua
La llegada de un pozo de agua cambia la vida de la comunidad y de sus gentes. Como dice Idriss Absoura, padre de 10 hijos y presidente del Comité de Higiene de Dirbeye, “la vida comenzó de verdad cuando tuvimos el pozo”. ¿Imaginabas que un pozo podría llegar a significar tanto?
En lugares como el Chad, las relaciones sociales se desarrollan en torno al pozo de agua de la comunidad. Mientras recogen el agua, las mujeres comentan sus actividades, charlan, ríen, hablan de sus dificultades... porque no siempre cuentan con la posibilidad de reunirse y estar juntas. El pozo es además de una fuente de agua, un elemento de cohesión social.
Maïmouna Souleimane cuenta cómo ha cambiado su vida gracias al trabajo que desarrolla Oxfam Intermón: “Cuando no había agua, todo era muy diferente. Cada viaje para buscarla suponía unas dos horas de trayecto. Por la mañana iba tres veces, y por la tarde, dos". ¿Te haces ahora una idea de su importancia?
Pero aún queda mucha labor por delante. Todavía nos esperan madres, padres, hijas e hijos que necesitan un pozo de agua.
Y entre todos podemos ofrecerles una nueva oportunidad: la de una vida con agua y la esperanza de un futuro mejor. Nuestra aportación económica, por pequeña que sea, sumada a la de otras personas como tú, es la llave que puede dar la vuelta al mundo. ¡Mójate por la causa!