Productos biodegradables: cómo vivir sin plástico

De todos los desechos que produce el ser humano, sin duda, uno de los más perjudiciales para el planeta es el plástico. Y el caso es que lo encontramos en infinidad de productos.

La mayoría de las marcas no ofrecen la posibilidad de adquirir sus productos sin comprar, al mismo tiempo, los envoltorios de plástico en los que vienen presentados. Embutido, fruta, todo tipo de alimentos como pasta, legumbres, carne, verduras, agua embotellada, refrescos… ¿Nos equivocamos?

Si te paras a pensar, el plástico es un material omnipresente y parece imposible hacer una vida normal sin utilizarlo. Sin embargo, la propia industria está trabajando en la solución a este grave problema medioambiental creando productos biodegradables con características similares al plástico derivado del petróleo. En este artículo te enseñamos a vivir sin plástico. ¡Sí, es posible!

Si hay una prueba visual de hasta dónde puede llegar el problema de los desechos plásticos que produce la humanidad son los vórtices de plástico en nuestros océanos, siendo el más conocido y grande la isla de plástico del Pacífico norte. Y no se trata solo de una aberración que podríamos llamar visual.

Porque, además, el plástico resulta un grave problema para la fauna marina, que lo engulle o queda enredado en él, y también para el ser humano, ya que micropartículas de este material pueden llegar a nuestro organismo a través de la cadena trófica. ¿Imaginas las consecuencias?

Materiales biodegradables para no usar más plástico

Algunas empresas están invirtiendo en proyectos de investigación y desarrollo (I+D) con el objetivo de producir plástico a partir de materiales orgánicos de modo que las bolsas y los envases resultantes sean biodegradables.

¡Queremos que conozcas algunos de estos proyectos!

• La empresa Ecovative ha conseguido fabricar plástico a partir de hongos. Es un producto que sustituye al contaminante poliespán y sirve para proteger los productos delicados dentro de los paquetes. Este material es 100% compostable. Los hongos, además, se alimentan a partir de desechos de la agricultura, así que es doblemente sostenible, ya que aprovecha un desperdicio de una actividad humana.
• Javier Fernández, científico de la Universidad de Harvard, ha creado un plástico inspirándose en la piel de los insectos. Así, con seda y cáscara de camarones o gambas, produce un vaso de plástico desechable. Según Fernández, estos vasos no solo son biodegradables (de modo que arrojarlos a la naturaleza no resulta perjudicial), sino que sirven como fertilizante, ya que el material contiene nitrógeno.
  
  
  
  

Iniciativas innovadoras y originales

Aunque la ciudadanía tenemos una gran responsabilidad en la lucha contra el uso masivo del plástico, afortunadamente, hay empresas e instituciones que se han unido a esta cruzada contra este material tan contaminante.

Te contamos algunas de las iniciativas más originales y novedosas:

• El aeropuerto de San Francisco no quiere más agua en botellas de plástico y ha decidido prohibir su venta en todo el recinto. Desde luego, miles de pasajeros pasan por allí cada día, y eso supone un gasto ingente de envases de plástico. Por supuesto, ha pensado en una alternativa: un centenar de fuentes de agua donde beber o rellenar el recipiente reutilizable que cada pasajero debe llevar consigo. Según datos de los responsables de la gestión del propio aeropuerto, esta medida ahorrará casi 4 millones de botellas de plástico al año. ¿Os imagináis que le imitaran todos los aeropuertos del mundo?
• El grupo Bimbo ha desarrollado un envase de plástico biodegradable al 100%. En año y medio, este recipiente plástico se convierte en dióxido de carbono, biomasa y agua. Por tanto, se puede arrojar al contenedor de basura orgánica. No es la primera empresa que desarrolla una iniciativa de este tipo, pero sí una de las primeras grandes multinacionales, lo que significa que la reducción de bolsas de plástico puede ser importantísima.
• Entre las nuevas materias primas que se usan para producir bioplásticos, encontramos el nopal. Es un proyecto surgido en la Universidad del Valle de Atemajac, en México. Se usa el jugo de este zumo, que contiene monosacáridos y polisacáridos, para producir plástico.

Ideas para evitar el plástico en tu compra diaria

Quizá te estés preguntando: "¿Qué puedo hacer yo en mi vida cotidiana para no usar plástico?". No es cometido fácil, pero puedes empezar siguiendo los siguientes consejos para entender que es posible vivir sin plástico:

Alimentos

• Aunque los supermercados y grandes superficies cada vez están más concienciados con el medio ambiente, en ocasiones no es fácil hacer la compra evitando envases de plástico. Por tanto, es preferible acudir a tiendas de barrio que vendan a granel y no usen plástico ni siquiera para pesar la fruta y verdura. Se pueden usar bolsas de cartón reciclado, pero aún mejor si eres tú quien llevas bolsas o envases y los reutilizas una y otra vez. Ya existen tiendas de productos de alimentación y cosmética que no usan plástico.
• Para conservar la comida puedes usar tarros de vidrio o de aluminio. Reutiliza los que traigas de la compra. Sirven tanto para guardar productos de uso diario, como la sal, el azúcar o las especias, como para conservar las sobras de la comida en la nevera.
• En cuanto a las verduras, un tipo de alimento que se estropea con mayor rapidez, también puedes usar botes de vidrio. Otra opción, sobre todo para las verduras que contienen mucha agua, como las lechugas, es envolverlas en un trapo o en papel de periódico antes de meterlas en la nevera. Otra opción es introducirlas en un bol con agua y poner un plato encima.
•  Si usas solo la mitad de una pieza (de una manzana, de un tomate, de una cebolla) no la envuelvas en film transparente. Colócala hacia bajo en un plato. El propio peso del alimento impedirá que entre el oxígeno y se estropee.
• En el caso del queso, si no lo envuelves en plástico conservarás todo su sabor. Es mejor cubrirlo con papel encerado y meterlo en un recipiente con algo de aire para que se oxigene y respire. O, como se ha hecho toda la vida, usar una quesera.

Productos de aseo y cosmética

• Compra los productos de aseo en formato sólido, no solo la pastilla de jabón, sino también el dentífrico.
• En algunas tiendas especializadas también venden cosmética a granel. Lleva tu propio tarro para comprar. Aunque aún mejor es elaborar tu propia cosmética de modo casero.
• Lo mismo ocurre con el protector solar, mejor si es casero.
• Usa tampones reutilizables, compresas de tela y copas menstruales.
• Muchos objetos que tradicionalmente se distribuyen en plástico pueden ser fabricados en madera. Por ejemplo, cepillos de dientes de bambú.

Comer fuera de casa

• Si llevas comida preparada al trabajo o a la escuela, usa fiambreras de vidrio o de metal.
• También hay alternativa a los utensilios para comer: cubertería fabricada en plástico reutilizable y pajitas de bambú. Es más, la empresa Bekeys comercializa cubertería… ¡comestible! Al terminar de comer, no se desechan los cubiertos: ¡te los comes!
• Por último, pero no menos importante, si quieres hidratarte fuera de casa, lleva contigo una botella de agua fresca para no tener que comprar agua embotellada en plástico.

Entre todos y todas, ciudadanía, empresas e instituciones tenemos que hacer un esfuerzo por desterrar de una vez y para siempre el plástico de nuestras vidas. Con ello, conseguiremos una economía más sostenible y lucharemos contra el cambio climático. Merece la pena... ¡y está en nuestras manos!