Todos los conflictos bélicos tienen un origen, unos efectos y unos medios para perpetuarse: las armas. En este post nos proponemos reflexionar sobre el riesgo que conlleva la venta de armas a través de la campaña “Armas Bajo Control”.

Si no conoces todo lo que se esconde detrás de este sector ni lo que se está haciendo para combatirlo, este post te ayudará a abrir los ojos. Después de leerlo, será imposible que mires para otra parte.

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Instalación de lápidas en Nueva York. Campaña "Armas Bajo Control" © Andrew Kelly

El control del comercio de armas, los conflictos bélicos y  la campaña "Armas Bajo Control"

Tras años de lucha de las ONG y la sociedad civil para reglamentar el comercio de armas a nivel mundial, hace tan solo unos años asistíamos a un momento relevante.

La Asamblea General de las Naciones Unidas aprobaba, en 2013, la puesta en marcha de un Tratado Internacional sobre el Comercio de Armas. Este convenio nació con el objetivo de impedir el desvío de armas al crimen organizado o al terrorismo y, a la vez, evitar que lleguen a manos de personas u organizaciones que puedan usarlas para perpetrar injusticias o crímenes.

En España, este acuerdo entró en vigor en 2014 y, además de estar obligado a seguirlo, nuestro país cuenta desde el año 2007 con una Ley de Comercio de Armas. Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón son las cuatro ONG que están detrás de la campaña “Armas Bajo Control” en nuestro país.

El objetivo de esta iniciativa es que exista una verdadera transparencia y un adecuado control sobre la venta de armas y evitar, así, el peligro de que el armamento llegue a países en guerra o que infrinjan los derechos humanos¡Conócela y difúndela!

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¿Nuestro país podría ser cómplice de los conflictos bélicos internacionales?

Coexistiendo una ley de ámbito nacional y un tratado de alcance mundial, no deberíamos albergar ninguna duda de que se está actuando correctamente en la transferencia de armamento desde nuestro país.

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Expendedora de armas utilizada en actos de calle en protesta por la ley de comercialización de armas ligeras aprobada por el gobierno español. © Pablo Tosco / Oxfam Intermón

Sin embargo, gracias a la labor de la campaña “Armas Bajo Control” tenemos que replantearnos esta confianza. A continuación vamos a analizar algunos aspectos que explican los motivos para dicha revisión. Veamos:

  • ¿Cómo es el mecanismo para la venta de armas en España?

En el informe Armas sin control, un oscuro negocio marca España, elaborado por las cuatro ONG que forman la campaña “Armas Bajo Control”, se indica que la Junta Interministerial Reguladora del Comercio Exterior de Material de Defensa y de Doble Uso (JIMDDU) es el organismo encargado de conceder o desestimar la exportación de armamento. No obstante, la Ley de Secretos Oficiales de 1968 permite que las actas donde esta junta da su beneplácito a la comercialización sean confidenciales, por lo que existe una carencia de transparencia en el proceso. Esto imposibilita que la ciudadanía o el Parlamento sepan los argumentos que han conducido a consentir o denegar una venta de armas. Y como resultado de ello, el gobierno no rendirá cuentas. Esta es la situación...

  • Los datos de la venta de armamento:

Según señala el informe El riesgo de la complicidad en la comisión de crímenes de derecho internacional, elaborado por la cuatro ONG que integran la campaña “Armas Bajo Control”, en 2015 se realizaron exportaciones de armas por un valor superior a los 3.900 millones de euros, mientras que en 2016 fueron superiores a los 4.300 millones de euros. ¿Qué te dicen las cifras?

  • El principio de no autorizar la venta de armas que pueda contribuir a perpetrar atrocidades y operaciones de alarma:

En este mismo informe se ponía de manifiesto la preocupación de estas cuatro ONG ante las exportaciones de armas desde España a algunos países que podrían incumplir esta regla. Por ejemplo, en casos como:

  • Munición, equipos y aeronaves, entre otros materiales, a Arabia Saudí, porque podrían facilitar la vulneración de los derechos humanos en Yemen.
  • Armas, vehículos y municiones a las Fuerzas Armadas de Bahréin porque podrían usarse en el enfrentamiento de Yemen.
  • Municiones y aviones, entre otros materiales, a Colombia, porque no hay garantías de que sean usados según el derecho internacional.
  • Municiones y vehículos militares, entre otros materiales, a Irak, porque hay peligro de que lleguen al Estado Islámico.
  • Mayor transparencia y control:

Amnistía Internacional, FundiPau, Greenpeace y Oxfam Intermón, a través de la campaña “Armas Bajo Control”, están concienciando a la ciudadanía sobre el peligro que puede suponer la venta de armamento y solicitando al gobierno un mayor compromiso. Se precisa un cambio en el mecanismo de control de la venta de armas que implique un mayor estudio sobre las evaluaciones de peligro que conllevan las operaciones. También es necesario revisar la toma de decisiones que lleva a cabo la junta o medidas de seguimiento tras la aprobación. Y, finalmente, pedir una mayor transparencia, es decir, exigir más información o la rescisión de acuerdos sobre datos confidenciales, entre otras cuestiones.

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Un activista derrama balas y municiones sobre el mapa de África frente a la sede de Naciones Unidas en reclamo de una ley que regule la comercialización de armas. © Oxfam Intermón

Campaña Armas Bajo Control: 10 años de lucha

Se cumplen 10 años desde la puesta en marcha de la campaña Armas Bajo Control y las cuatro ONG siguen trabajando para lograr la plena transparencia y el correcto control del comercio de armas en nuestro país y en el mundo.

Júlia Serramitjana, miembro del departamento de comunicación de Oxfam Intermón, estuvo presente en uno de los últimos actos de esta campaña y en esta ocasión nos cuenta su experiencia. ¡Conócela!:

  • Armas Bajo Control: navegando en el mismo barco. Nos subimos a Esperanza, uno de los barcos de Greenpeace para pedir el fin del secretismo en la venta de armamento español.
  • Alzar la voz conjuntamente para denunciar las injusticias. Eso es lo que hicimos el pasado mes de septiembre las cuatro ONG que impulsamos la campaña “Armas bajo control” (Amnistía Internacional, Greenpeace, FundiPau y Oxfam Intermón). ¿Para qué lo hicimos? Para pedir el fin del secretismo en la venta de armamento español a Arabia Saudí y para denunciar la falta de control del uso de las armas exportadas, prácticas que quedan patentes en el informe “Armas sin control. Un oscuro negocio Marca España”. ¿Cómo lo hicimos? Juntos, los directores de las cuatro ONG, en una rueda de prensa a bordo del barco Esperanza, de Greenpeace, en el puerto de Bilbao. ¿Por qué escogimos ese lugar? Porque desde allí, según los informes recibidos, en el último año han partido con destino a Arabia Saudí más de 300 contenedores con explosivos que podrían ser usados en el conflicto de Yemen. Esa fue la razón por la que fuimos allí a contarlo.
  • Uno de los temas que más salieron durante nuestras conversaciones a bordo del Esperanza es que todos vemos inaceptable la respuesta del Gobierno al conflicto de Yemen, la mayor crisis humanitaria del mundo según la ONU, en la que al menos siete millones de personas se hallan al borde de la hambruna y cientos de miles sufren cólera. No aceptamos que la opción sea reducir la ayuda humanitaria y vender armas sin control.
  • La guerra en Yemen está exacerbando la dura situación humanitaria del país más pobre de Oriente Próximo, mientras ambas partes impiden la distribución de la ayuda humanitaria. El Gobierno español debe controlar sobre el terreno cómo usa Arabia Saudí las bombas, la munición o los aviones de reabastecimiento en vuelo exportados desde el año 2015, ya que son armas susceptibles de ser empleadas en los bombardeos en ese país. Pedimos que España incremente sustancialmente la partida en ayuda humanitaria.
  • Cada día, millones de personas son asesinadas, violadas, torturadas o forzadas a huir de sus hogares debido a un control del comercio de armas insuficiente. Hoy día circulan por el mundo 640 millones de armas y cada año se fabrican ocho millones más.

Conflictos bélicos: cómo frenarlos desde nuestros países

Europa no solo puede ayudar a disminuir los efectos de los conflictos bélicos que tienen lugar en otras zonas del mundo construyendo campos de personas refugiadas o ampliando sus plazas para acoger víctimas del desplazamiento forzoso, tal como ocurre hoy día en países como Grecia, Italia o Turquía, entre otros.

También tiene ante la sí la opción (y obligación moral) de actuar sobre el terreno en el que se generan las guerras como la de Siria.

¿Pero cómo hacerlo? No solamente contribuyendo a planes de desarrollo que propicien las condiciones esenciales para que las personas no abandonen sus países por necesidad humanitaria, sino controlando la venta de armas hasta no tener las garantías de que estas no serán utilizadas para ahondar conflictos. ¡El poder para cambiarlo está en nuestras manos!

Controlar la venta de armas: una cuestión de ética

Oxfam Intermón, Amnistía Internacional, Greenpeace y FundiPau (las cuatro ONG que impulsamos la campaña “Armas Bajo Control” en España) trabajamos en alianza para denunciar el riesgo de que se autoricen exportaciones de armas a países que se hallan en conflicto o que violan los derechos humanos.

Y, además, nos encargamos de seguir el desarrollo de la ley y su aplicación, para que suponga un verdadero avance en materia de control y transparencia.

Todos y todas sabemos las consecuencias que los conflictos bélicos entrañan para la población, sin olvidar la reciente crisis de población refugiada que la comunidad internacional no ha sabido gestionar con la debida diligencia.

Por todo ello, es necesario meditar a fondo sobre la venta de armamento. Tanto la ciudadanía como los gobiernos deben implicarse, pues llegó el momento de ser responsables y obrar de forma ética. ¿Seguiremos dando la espalda a esta situación?

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