Índice de contenidos

1 Roles sexistas de la mujer en la publicidad
- 1.1 Material complementario
  - 1.1.1 Guías
  - 1.1.2 Artículos

Desde aquellos spots y carteles publicitarios en los que aparecían ‘perfectas’ amas de casa con su inmaculado delantal, peinado de peluquería y una gran sonrisa que mostraba su felicidad al utilizar el producto con el que lograba que su hogar relumbrara, la imagen de la mujer en la publicidad ha cambiado bastante.

¿Pero hemos alcanzado la igualdad de género total en la publicidad? Desgraciadamente, aún queda mucho por hacer para que la publicidad sea 100% igualitaria. Así que te damos algunas claves para leer los anuncios en clave de igualdad. ¡Nos interesa a todas y todos!

Según el último informe del Observatorio de la Imagen de la Mujer (OIM) publicado en 2014, las quejas en el sector de la publicidad aumentaron considerablemente respecto a 2013, pasando de 144 a 605. De modo que esto nos lleva a preguntarnos: ¿cómo es la imagen de la mujer en la publicidad de hoy en día?

Roles sexistas de la mujer en la publicidad

Es cierto que la imagen de la mujer en la publicidad se ha modernizado en las últimas décadas. Sin embargo, aunque los roles que se ofrecen de ella son distintos, siguen siendo sexistas o están cargados de estereotipos. ¡Echémosles un vistazo! Seguramente te resultarán muy familiares...

Mujer profesional. Las pocas veces que se presenta a una mujer trabajadora nos muestran una mujer triunfadora en lo profesional con una estética siempre impecable: una superwoman.
Mujer perfecta. La publicidad impone a las mujeres un modelo imposible de cumplir. Hay que estar permanentemente guapas, delgadas y contentas.

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Ama de casa. Este rol tradicionalmente femenino, aunque algo actualizado, seguimos viéndolo en numerosos spots Los productos de limpieza siguen siendo publicitados mayoritariamente con mujeres, presentándolas como abnegadas amas de casa obsesionadas con la limpieza. Aunque cada vez aparecen más aparecen hombres realizando las tareas del hogar, sigue siendo algo anecdótico. Lo peor de este rol es que en los anuncios de juguetes se sigue perpetuando, pues son las niñas las que aparecen jugando a "cosas de mujeres" (cocinitas, bebés, etc.), mientras que los niños hacen "cosas de hombres" (coches, construcciones, etc.). ¡Es esencial educar desde la infancia en la igualdad de género!
Madre de familia. Quizá sea en este rol en el que se noten más avances, pues empieza a ser más habitual ver a hombres ejerciendo de padres en la publicidad. Aunque aún no son igualitarias sus apariciones comparado con el número de veces que vemos a una mujer en el rol de madre...
Objeto sexual. La mujer o su cuerpo desnudo como reclamo publicitario sigue llenando nuestras pantallas y los carteles de nuestras ciudades. Desde perfumes, pasando por ropa íntima masculina, hasta libros y casi cualquier producto son publicitados en demasiadas ocasiones utilizando el cuerpo de la mujer.
Hipersexualización de las niñas. La erotización de las niñas es algo que se ha normalizado en la publicidad. Frecuentemente aparecen niñas maquilladas o vestidas como chicas jóvenes y adoptando posturas sensuales.
Erotización de la violencia. De vez en cuando lanzan campañas publicitarias en las que, de manera a veces velada y otras explícita, utilizan la violencia de género como recurso para vender mostrando a una o varias mujeres humilladas o sometidas por un hombre.

En definitiva: la mujer en la publicidad sigue apareciendo en la mayoría de las campañas en el ámbito privado (hogar, puerta del colegio, etc.), mientras que el hombre aparece en el ámbito público (empresas, conduciendo coches, etc.).

Se sigue atribuyendo a las mujeres la preocupación por los hijos e hijas, por su aspecto físico (delgadez, belleza, joyas…) y por las tareas del hogar. Rara vez se las muestra leyendo, practicando deportes o en profesiones liberales. ¡Queda mucho por luchar para cambiar la imagen de la mujer en la publicidad! ¿El primer paso? Empezar modificando nuestra manera de verla y de consumir...