Vivimos en la era de la inmediatez, lo que queremos lo queremos ya, no podemos esperar. Esto afecta a todas las áreas que componen nuestra vida: información, ocio, belleza, salud y, como no, a la comida. La comida rápida triunfa en todo el mundo, pero ¿qué consecuencias tiene para el medio ambiente y las personas? ¿En qué lugar se sitúa nuestro país en el consumo de comida rápida? ¡Déjate sorprender por los datos que te contamos en este post!
¿Cuántas veces has comprado comida rápida en la calle? ¿Una hamburguesa o unos tallarines de un establecimiento take away te han servido para reponer fuerzas en mitad de un intenso día? ¿Y te has parado a pensar en el impacto que tiene la industria de la comida rápida en el medio ambiente y en la sociedad?
Impacto medioambiental de la comida rápida
La gran mayoría de los ingredientes de los platos de comida rápida son de origen animal: carne, lácteos y huevos. Lo cual quiere decir que son necesarias grandes explotaciones ganaderas para abastecer a la industria. ¿Qué necesita el ganado? Pasto. ¿Y cómo se consigue la enorme extensión de pasto necesaria para alimentar a tantos animales (un capítulo aparte merece la cría intensiva de animales y el trato que reciben)? Gracias a la tala masiva de bosques y selvas.
Como imaginas, pues, la deforestación tiene su peor enemigo en la industria de los países que consumen más comida rápida. Las consecuencias de la desforestación son fatales para el medio ambiente:
- El terreno desforestado no suele ser apto para el uso agrícola.
- El suelo queda expuesto al calor y a la lluvia, de forma que se va degenerando y cada vez resulta más difícil reforestarlo.
- Las zonas desforestadas son proclives a las inundaciones y a épocas de grandes sequías.
- Se deteriora la biodiversidad y se va reduciendo el número de especies de animales y de plantas.
- Desplazamiento forzoso de las comunidades de indígenas.
- Aumenta el CO2 en la atmósfera y contribuye al calentamiento global.
También hay que tener en cuenta la contaminación que producen los envases y demás utensilios de plástico que se utilizan en la comida rápida para llevar: bolsas, cubiertos, cajas, vasos, platos, etc. ¡Todo suma!
La industria de comida rápida genera pobreza económica
Para que la comida rápida sea tan barata han tenido que reducir los costes en toda la cadena, desde su producción, pasando por la elaboración y la distribución, hasta la venta al consumidor final. Y una de las consecuencias de ello es que las personas que trabajan en esta industria, por lo general, no tienen buenas condiciones laborales: ni el personal que atiende los cultivos y el ganado, ni el de las fábricas, ni los transportistas ni las personas que te atienden en los establecimientos de comida rápida. Por ejemplo, en España, los salarios de las personas que trabajan en establecimientos de comida rápida van desde los 4 € la hora.
Estarás intuyendo, pues, que el cambio climático genera desigualdad social. Las inundaciones, sequías y huracanes, consecuencia del cambio climático provocado por la deforestación, destruyen los cultivos de muchos productores y productoras locales que dependen de su cosecha para vivir. ¿Lo habías pensado alguna vez?
Los países que consumen más comida rápida
Aunque su consumo aumenta año a año en nuestro país, España no está a la cabeza de los países que consumen más comida rápida, sino todo lo contrario. Según un estudio elaborado por EAE, el ranquin de países en cuanto al consumo de comida rápida es este:
Por estas y otras razones, ¡elegimos una alimentación saludable y un estilo de vida slow! Y tú, ¿necesitas más razones para llevar una vida sana para ti y sostenible para nuestro planeta?
